Sobre las aguas tranquilas del mar descansas Alfonsina,
te meces en sus olas, tu mirada se pierde tras las algas marinas
mientras cae la noche sobre ti y sobre el mar,
tu figura se esconde en los recuerdos de toda soledad.
Nadie vino hasta aquí a ver morir la tarde en su letargo,
siempre sola te encuentra ese barco que llega de algún puerto lejano.
Tal vez vengan de lejos a hacerte compañía su perfume o su risa
y a tí que se antoja darle a la mar los besos que a tí se te morían.
Y te vas Alfonsina, te alejas sin mirar el día que agoniza,
te elevas con los vientos que besan ese mar que te cautiva.
Sube a la superficie la vieja caracola y te canta sus versos de suaves melodías,
mientras tus ojos buscan acaso entre las sombras su figura perdida.
Y te vas Alfonsina.. .el frío de la noche te acuna y da consuelo,
te alejas ave herida, tus sueños te llevaste rumbo a los cielos.
sobre las aguas tranquilas lágrimas de amor caen adormecidas,
el viento las recoge y las lleva en silencio hacia la orilla.
Dónde irás Alfonsina con tu dolor a cuestas y el alma derrotada,
acaso entre mil sueños te ha sorprendido el alba con luces de nostalgias
